Empieza un huerto en casa
Los huertos en casa favorecen las cadenas cortas agroalimentarias, las cuales constituyen los modelos de alimentación y consumo más saludables y responsables con el medio ambiente.
Tener un huerto en casa podría ser el primer gran paso para cambiar tu estilo de vida hacia uno más sano, responsable y ecológico. De hecho, los huertos en casa tienen múltiples beneficios: lograr una dieta saludable y a mejor precio; mayor entendimiento sobre los procesos de la naturaleza; tener alimentos durante todo el año; conocer el proceso de cultivo y la calidad de lo que comes; y contar con la posibilidad de mejorar los ingresos.
Si ya te decidiste a reinventar tu estilo de vida, te ayudamos con estos tips para que tengas éxito:
El lugar ideal: uno con luz directa y una toma de agua cerca
En la mayoría de las ocasiones no podemos elegir entre varias ubicaciones para el huerto y tenemos que adaptarnos al espacio disponible. La mejor orientación para ubicar un huerto en casa es aquella que nos permite una buena cantidad de horas de luz directa, normalmente orientación sur o sureste. También es importante valorar la disponibilidad de luz que tenemos en las diferentes épocas del año y qué tipo de cultivo vamos a realizar. Para el huerto se debe tener una toma de agua cercana que nos permita tomar la que necesitemos mediante una regadera o una manguera o poder instalar un sistema de riego por goteo, de acuerdo con el Manual huertos sostenibles en casa, que elaboró el departamento de Alicante en España.
Empieza por las hortalizas más amigables
Las lechugas, los rábanos, la rúcula y los ajos son hortalizas de más fácil cultivo que otras, además se adaptan fácilmente a las huertos que se elaboran en recipientes de plástico pequeños, cuyo tamaño puede limitar el desarrollo de algunas hortalizas. El rábano, el chile serrano y la espinaca son hortalizas que, además, se dan todo el año.